Denunciado en julio y agosto de 2022: 1.850 practicantes de Falun Gong detenidos o acosados por su fe

En julio y agosto de 2022 se confirmaron otros 1.850 incidentes de practicantes de Falun Gong arrestados o acosados por su fe.

Falun Gong, también conocido como Falun Dafa, es una disciplina espiritual que ha sido perseguida por el Partido Comunista Chino (PCC) desde 1999. Innumerables practicantes han sido detenidos, acosados, condenados y torturados por defender su fe. Pero debido a la estricta censura de la información en China, los incidentes no siempre pueden ser denunciados a tiempo, ni toda la información está fácilmente disponible.

De los 1.850 nuevos incidentes denunciados, 1.043 fueron detenciones y 807 casos de acoso. La mayoría de los casos se produjeron durante el periodo de reportado, mientras que algunos eran de 2021 o anteriores a 2022.

El número real de detenciones y casos de acoso en julio y agosto de 2022 será seguramente superior a las cifras actualmente comunicadas (805 y 645 respectivamente), a medida que vaya llegando nueva información con más casos denunciados y confirmados. Incluso con las cifras actuales, la media de detenciones y acoso en estos dos meses duplica las medias de los seis meses anteriores. Se cree que estos aumentos reflejan un intento de evitar que los practicantes de Falun Gong hablen de la persecución antes del próximo 20º Congreso Nacional del Partido del Congo, previsto para mediados de octubre.

Los nuevos casos de persecución denunciados se produjeron en toda China, siendo Heilongjiang (394), Shandong (230) y Jilin (227) los que más casos combinados de detenciones y acoso registraron. Hebei, Sichuan, Liaoning y Beijing también informaron de casos de tres dígitos.

Los Comités Locales de Asuntos Políticos y Legales acosaron a muchos practicantes ordenándoles firmar declaraciones en las que prometían no creer en Falun Gong, no promover Falun Gong y no oponerse al PCCh.

Los practicantes perseguidos procedían de todos los ámbitos de la vida, incluidos antiguos empleados del gobierno, profesores, gerentes de empresas, maestros, médicos, ingenieros y contables. Ciento treinta y ocho (13,1%) de los practicantes detenidos tenían 60 años o más, incluidos 19 de 80 años y una mujer de 98 años.

Un total de 614 profesionales vieron sus casas saqueadas. A 48 de ellos se les confiscó un total de 611.727 yuanes en efectivo, incluidos 373.000 yuanes de una practicante que había sacado el dinero del banco para ayudar a su hijo a comprar una casa. También se suspendieron las pensiones de catorce practicantes de edad avanzada.

La violencia policial se intensificó en estos dos meses. Un director de recursos humanos jubilado de la provincia de Henan, de 70 años, murió justo un día después de ser detenido, el 18 de julio. El propietario de un estudio fotográfico fue atado a una silla metálica y torturado durante tres días. Una ex profesora universitaria fue agredida sexualmente por un grupo de policías y un hombre que fue traído específicamente para torturarla.

Los niños pequeños tampoco se libraron de la persecución. Un niño de dos años fue interrogado y otra niña de nueve años presenció el asalto policial a su casa y también fue interrogada tras la detención de su abuela.

A continuación se exponen algunos ejemplos de casos de este periodo:

Detenciones en grupo y acoso antes del 20º Congreso Nacional

Desde julio de 2022, se produjeron varias detenciones en grupo en Beijing, Heilongjiang, Liaoning, Hebei y Sichuan. Muchos policías revelaron que la orden venía de arriba y el objetivo era mantener la estabilidad social antes del Congreso del Partido. 

El 12 de julio de 2022 fueron detenidos catorce residentes de la ciudad de Daqing, en la provincia de Heilongjiang, entre ellos una mujer de 98 años. Entre el 11 y el 12 de julio, otros 20 practicantes de otras cuatro ciudades de la provincia de Heilongjiang también fueron detenidos, según una orden de la Oficina 610 de Heilongjiang. 

Según los agentes que participaron en las detenciones, recibieron una lista de nombres de los funcionarios provinciales. Las autoridades vigilaron y grabaron a los practicantes durante nueve meses. Una semana antes de las detenciones, reforzaron la vigilancia de las actividades diarias de los practicantes. 

El 13 y el 18 de julio se produjeron otras dos detenciones en grupo de diez y nueve practicantes en la ciudad de Benxi, provincia de Liaoning, y en la ciudad de Handan, provincia de Hebei, respectivamente. 

En la ciudad de Wanyuan, provincia de Sichuan, el Comité de Asuntos Políticos y Legales (PLAC) inició una nueva ronda de sesiones de lavado de cerebro dirigidas a los practicantes locales de Falun Gong. En esta campaña, dos oficiales de diferentes niveles del PLAC fueron emparejados para trabajar con cada practicante individual. El comité local de la calle del practicante y algunos de sus familiares también recibieron la orden de estar presentes para ayudar en el lavado de cerebro. 

En la ciudad de Chengdu, provincia de Sichuan, la Oficina 610 y el PLAC también organizaron a la policía local y a los miembros del comité de calle para que acosaran a los practicantes. 

Los agentes solían acudir en grupo y ordenaban a los practicantes que escribieran declaraciones prometiendo no creer en Falun Gong, no promover Falun Gong y no oponerse al Partido Comunista Chino. 

Si los practicantes se negaban a hacerlo, los agentes les tomaban a la fuerza las huellas dactilares. Muchos practicantes informaron de que tenían los brazos y las manos magullados por la fuerza violenta. Los agentes amenazaron con tomar represalias contra ellos si los practicantes denunciaban el acoso a Minghui.org. Los familiares de algunos practicantes también se vieron obligados a unirse a los agentes para persuadir a sus seres queridos. 

En algunos casos, los agentes engañaron a los practicantes para que escribieran cosas buenas sobre Falun Gong. A continuación, retocaban los documentos y trasladaban las firmas de los practicantes a una declaración de renuncia. A veces mostraban las declaraciones adulteradas a otros practicantes para sacudir su voluntad, diciendo “Fulano lo ha firmado, ¿por qué no lo haces tú?”. 

Ex profesora universitaria agredida sexualmente por un experto en tortura

La Sra. Jiang Yongqin, ex profesora universitaria de 53 años de la ciudad de Jilin, provincia de Jilin, fue detenida en su domicilio el 12 de junio. Tras un mes de detención, fue llevada a un centro secreto con la cabeza cubierta y los oídos tapados alrededor del 7 de julio. 

Cuatro hombres esposaron a la Sra. Jiang y le exigieron la contraseña de su disco duro. Ella se negó a responder. A continuación, los policías le introdujeron a la fuerza agua de wasabi en la nariz y luego le introdujeron cigarrillos encendidos. Al introducir el cigarrillo, éste se rompió. La policía dejó la mitad del cigarrillo en su cavidad nasal, que finalmente expulsó al toser. 

Tras la primera ronda de torturas, los policías comenzaron a agredirla sexualmente. Le levantaron la camisa. Un experto en torturas ordenó a los policías que le tocaran el pecho.  El experto utilizó un masajeador especial para estimular su pecho.

A continuación, el experto obligó a la Sra. Jiang a quitarse los pantalones. Cuando los pantalones estaban medio bajados, la policía descubrió que estaba menstruando. El experto afirmó que la tortura tenía el mejor efecto durante la menstruación y ordenó a la policía que continuara. La Sra. Jiang estuvo a punto de derrumbarse y se sumió en la desesperación. Cedió y se vio obligada a cooperar con la policía en el interrogatorio.

Antes de que el experto se marchara, amenazó con que si la Sra. Jiang no cooperaba con ellos, revisaría todos los días las cosas de su “caja de herramientas de tortura”, que tenía palillos, instrumentos extraños, frascos de droga y cables eléctricos. Añadió que solía ser conservador al torturar a los sospechosos habituales con la “caja de herramientas”, pero cuando se trataba de practicantes de Falun Gong, tenía vía libre.

Niño de dos años interrogado por las creencias espirituales de su abuela

La Sra. Wang Yanhua, de 55 años de edad y originaria de la ciudad de Hulunbuir, Mongolia Interior, ha estado viviendo con su hija en la ciudad de Sanhe, provincia de Hebei, en los últimos años. Debido a que su documento de identidad ha sido marcado por practicar Falun Gong, ha sido sometida a un constante acoso mientras viajaba. La policía de Hulunbuir incluso dio instrucciones a sus homólogos de Sanhe para que acosaran a la señora Wang en casa de su hija. Durante el acoso, sus nietos, de 2 y 3 años, no se salvaron.

La Sra. Wang y su marido subieron a un tren de vuelta a Hulunbuir desde Sanhe con su nieto de dos años la noche del 30 de septiembre de 2021. Al salir de la estación de tren a la mañana siguiente, cuatro guardias de seguridad la detuvieron y la llevaron a una sala para un registro corporal.

Cuando la Sra. Wang se negó a responder a la pregunta de si seguía practicando Falun Gong, uno de los agentes apartó a su nieto de dos años y le preguntó: “¿Tu abuela sigue practicando Falun Gong? ¿Dónde lo practica? ¿Dónde guarda sus cosas de Falun Gong?”.

El niño estaba tan asustado que se quedó paralizado y no pudo pronunciar una palabra. Su rostro estaba pálido. Los agentes sólo dejaron de interrogar al niño cuando la señora Wang amenazó con emprender acciones legales contra ellos por acosar al niño.

Casi un año después, a las 20 horas del 4 de julio de 2022, dos agentes enmascarados irrumpieron en la casa de la hija de la Sra. Wang en Sanhe.

Mientras tomaban la foto de la Sra. Wang, un agente también dirigió la cámara a su nieta de tres años. La niña temblaba de miedo y estaba traumatizada por el incidente.

Basado en un informe original de Minghui.org