Estadísticas & Evidencias
Durante años, el Partido Comunista Chino (PCCh) ha clasificado cualquier información sobre los abusos a los derechos humanos contra personas que practican Falun Dafa como "secretos de estado", lo que hace que sea peligroso para cualquiera investigar. De hecho, muchos de los que han investigado se convirtieron en víctimas de encarcelamiento injusto y tortura.
El PCCh también ha utilizado la influencia política y financiera en todo el mundo para mantener a los periodistas en silencio, o para impulsar narrativas falsas sobre Falun Dafa.
¿El resultado?
Esta campaña sistemática de secuestros, tortura y muerte dirigida a decenas de millones de chinos permanece en gran parte oculta a la vista del mundo.
Sin embargo, al reunir informes de las Naciones Unidas, el gobierno de los Estados Unidos, organizaciones de derechos humanos y algunos trabajos de investigación periodística de alta calidad, el alcance real y la escala de esta campaña de persecución surge con mucha claridad.
Los siguientes son indicadores clave que cuantifican esta crisis de derechos humanos.
70 a 100 milliones de practicantes de Falun Dafa
Había entre 70 y 100 millones de personas practicando Falun Dafa en China, antes de julio de 1999. Si bien algunos han atribuido esta estimación a fuentes de Falun Dafa, el número en realidad proviene de las autoridades chinas. Específicamente, estos números provienen de una encuesta realizada por el régimen chino en los últimos meses de 1998, y fueron citados en múltiples ocasiones por los medios de comunicación occidentales como el New York Times y Associated Press, antes de su prohibición en julio de 1999; incluso fueron citados esporádicamente en los meses siguientes.
Las siguientes son algunas fuentes que respaldan esta cifra:
Curiosamente, la propia televisión estatal de China emitió un programa de noticias antes de julio de 1999, en el que la presentadora le dice a la audiencia que “más de 100 millones de personas están practicando Falun Dafa en todo el mundo”-, un número corroborado por un oficial de la Comisión Nacional de Deportes de China, entrevistado por U.S. News & World Report.
Sin embargo, poco después del inicio de la persecución, el régimen chino cambió drásticamente su estimación a 2 millones, como parte de su campaña de propaganda y un medio para restar importancia a la escala de las violaciones. Esto se señala en un artículo de New York Times, “Jefes del movimiento instan a tener una discusión con China“, publicado el 24 de julio de 1999.
No todos los medios siguieron la propaganda de Beijing.
El 13 de noviembre de 1999, Associated Press publicó el artículo “4 del grupo espiritual chino son sentenciados“, donde dice: “Antes de la represión, el gobierno estimaba que había 70 millones de membresías— lo que lo haría más grande que el Partido Comunista Chino make it larger than the Chinese Communist Party, with 61 million members”. New York Times publicó también éste artículo el mismo día.
Desafortunadamente, muchos otros medios siguieron el ejemplo de Beijing y redujeron el número oficial estimado, o cambiaron la fuente, atribuyendo la estimación únicamente a las “afirmaciones” de Falun Dafa, en lugar de lo que realmente son: cifras oficiales del régimen chino, como conclusión de una extensa encuesta realizada en 1998.
Varios millones detenidos
Si bien no es posible conocer el número exacto de personas detenidas por practicar Falun Dafa en China (tales cifras se consideran un “secreto de estado”), varios indicadores sugieren que, como mínimo, durante los últimos 20 años, el número total son varios millones.
A continuación, algunos datos a considerar…
Cientos de miles torturados
Desde principios del 2000, el uso de la tortura en los detenidos de Falun Dafa ha sido ampliamente documentado por los principales medios de comunicación, organizaciones de derechos humanos y las Naciones Unidas. Hay al menos 100,000 casos de tortura documentados por Minghui.org, y hay razones para creer que el número real es varias veces mayor.
A continuación, se muestran algunos de estos documentos…
Miles de muertos confirmados
Número real mucho mayor
Hay más de 5,000 casos documentados de practicantes de Falun Dafa que murieron como resultado de torturas y abusos bajo custodia policial, desde julio de 1999.
Dentro de China, es difícil y peligroso descubrir y verificar información relacionada con muertes resultantes de actos ilícitos. Algunos de los que han denunciado la tortura y el asesinato de practicantes de Falun Dafa han sido torturados y asesinados. Por lo tanto, se cree ampliamente que este número es solo una fracción del verdadero número de personas asesinadas por su fe en Falun Dafa, en China.
En el informe de derechos humanos de 2007 del Departamento de Estado de EE.UU. se estipula: “Desde que comenzó la represión a Falun Dafa, en 1999, las estimaciones del número de seguidores de Falun Dafa que murieron bajo custodia debido a tortura, abuso y negligencia oscilaron entre varios cientos y unos miles”.
Asesinados en “una escala significativa” por sus órganos
Estimaciones de varios informes independientes diferentes indican que decenas de miles (posiblemente cientos de miles) de practicantes de Falun Dafa pudieron haber sido asesinados para sustraer sus órganos vitales, que se utilizaron para impulsar un floreciente negocio de trasplantes de órganos en China.
El primer informe de David Kilgour (ex Secretario de Estado de Canadá para Asia-Pacífico) y David Matas (reconocido abogado de derechos humanos) titulado Cosecha sangrienta, El asesinato de Falun Dafa por sus órganos. El otro informe es del autor, periodista de investigación y especialista en China, Ethan Gutmann, titulado: La matanza: Asesinatos en masa, sustracción forzada de órganos y la solución secreta de China a su problema de disidentes.
Además, en 2017, Freedom House publicó un informe especial La batalla por el espíritu de China que cita “evidencia creíble que sugiere que, a principios de la década de 2000, los detenidos de Falun Dafa fueron asesinados por sus órganos a gran escala”.
El 17 de junio de 2019, un tribunal independiente en Londres, presidido por Sir Geoffrey Nice QC, quien trabajó en el Tribunal Penal Internacional y dirigió el enjuiciamiento de Slobodan Milosevic, publicó su Conclusión de forma breve y sentencia resumida.
La sentencia concluyó: “La sustracción forzada de órganos ha ocurrido durante años en toda China a una escala significativa, y los practicantes de Falun Dafa han sido una, y probablemente la principal fuente de suministro de órganos”. El Tribunal no ha tenido pruebas de que la importante infraestructura asociada con la industria de trasplantes de China se haya desmantelado y, en ausencia de una explicación satisfactoria sobre la fuente de los órganos disponibles, concluye que “la sustracción forzada de órganos continúa hasta hoy”.
Según un informe de Reuters de septiembre de 2019, Hamid Sabi, abogado del Tribunal de China, afirmó en el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas (CDH) que la sustracción forzada de órganos en China ha involucrado a “cientos de miles de víctimas”, principalmente practicantes del movimiento espiritual prohibido de Falun Dafa.
Tanto la Cámara de Representantes de EE.UU. como el Parlamento Europeo aprobaron resoluciones en 2016 y 2013, respectivamente, para expresar preocupaciones con respecto a los “informes persistentes y creíbles sobre la sustracción forzada y sistemática de órganos, con la autorización del estado en la República Popular China, dirigida a los presos de conciencia, sin su consentimiento, e incluyendo un gran número de practicantes de Falun Dafa y miembros de otras minorías religiosas y étnicas “.
200,000 “sitios de materiales” clandestinos
Hoy en día, en toda China, hay más de 200,000 imprentas clandestinas, lo que probablemente constituye el mayor movimiento de resistencia civil, no violenta del mundo.
Desde los primeros días de la persecución, los practicantes de Falun Dafa han creído que la clave para una resolución pacífica reside en el propio pueblo chino. Después de todo, ha sido la gente la que lleva a cabo la represión diaria: los departamentos de policía y administradores de campos de trabajo forzado de pequeños pueblos, los maestros de escuela obligados a delatar a estudiantes de Falun Dafa, los vecinos que informan sobre sus vecinos practicantes. Los practicantes de Falun Dafa razonan que, si la gente supiera la verdad, ya no serían cómplices de esta injusticia.
A partir de 2001 y hasta el día de hoy, los practicantes de Falun Dafa han establecido imprentas clandestinas en casi todos los condados y distritos del país, el equivalente chino del samizdat soviético. Desde sus salas de estar, los practicantes han establecido conexiones seguras a Internet y han accedido a sitios web fuera de China mediante el uso de servidores proxy, descargaron materiales censurados sobre la persecución a Falun Dafa y las utilizaron para producir folletos caseros.
Otros se ofrecen como voluntarios para distribuir los materiales, generalmente durante la noche. Estas acciones siempre se toman con gran riesgo. Miles de personas han sido arrestadas y muchas asesinadas por posesión y distribución de estos materiales, o por operar los sitios de producción.
Numerosas evidencias de estas imprentas clandestinas provienen de una multitud de fuentes: desde estadísticas oficiales sobre incautaciones policiales de material informativo de Falun Dafa, hasta relatos anecdóticos de ciudadanos que, al despertar, encuentran regularmente CD o folletos sobre la persecución esperando afuera de su puerta. El régimen chino y los sitios web del Partido Comunista informan de manera rutinaria sobre los esfuerzos para limitar la circulación de materiales relacionados con Falun Dafa.
En la primavera de 2009, por ejemplo, la Administración Provincial de Transporte de Fujian emitió un aviso en el que ordenaba que, entre los elementos que serían apuntados como parte de una ofensiva nacional contra las publicaciones ilegales, se encontraban aquellos que “calumniaban el sistema político del país, distorsionaban la historia del Partido ,… [o] publicitaran Falun Dafa “.
20 a 40 millones de personas comprometidas en la desobediencia civil
Se estima que hay entre 20 y 40 millones de personas en China que practican Falun Dafa y participan activamente en actividades de desobediencia civil.
En mayo de 2009, el sitio web principal, en idioma chino, de Falun Dafa, Minghui.org, informó que existen aproximadamente 200,000 “sitios de materiales” clandestinos en China. Los sitios de materiales son lugares donde los practicantes de Falun Dafa imprimen folletos, producen DVD, etc., cuyo contenido revela la persecución y desacredita la propaganda anti-Falun Dafa. Estos sitios son operados a nivel civil en toda China y generalmente están ubicados en la trastienda de una residencia privada. Cada sitio proporciona materiales a 100-200 practicantes de Falun Dafa, quienes luego distribuyen los materiales. Estos números indican que entre 20 y 40 millones de practicantes de Falun Dafa están trabajando activamente para exponer la represión generalizada que enfrentan en China. El número de personas que están practicando, pero no toman parte de esta resistencia pacífica, es desconocido.
En 2017, Freedom House publicó uno de los informes de terceros más completos sobre Falun Dafa, llamado “Falun Dafa: La batalla por el espíritu de China“. El informe estipula: “Más de 17 años después de la prohibición de Falun Dafa, hay razones para creer que millones y, posiblemente, decenas de millones, en China continúan practicando”.
Cuál es la fuente de evidencia?
Nuestros casos documentados, estadísticas y análisis se basan en informes de una variedad de fuentes de alta calidad. He aquí un vistazo más de cerca a cinco de las fuentes más comunes…
1. Pruebas de primera mano
Cientos de personas que han escapado de China traen consigo no sólo historias desgarradoras de abuso, sino a menudo cicatrices y a veces incluso fotos, videos o documentos policiales que corroboran sus casos.
Decenas de personas que fueron rescatadas de las prisiones chinas por los esfuerzos internacionales también están entre aquellos cuyos relatos personales ayudan a completar la historia.
Por último, aquellos que murieron por la persecución, aunque sus historias fueron capturadas en la cámara y sacadas de contrabando de China, también son una fuente de pruebas de primera mano.
Lea nuestra colección de relatos personales sobre la persecución.
2. Red vasta dentro de China
En las últimas dos décadas, los editores del sitio web Minghui.org han recibido decenas de miles de informes de primera mano de toda China, más que cualquier otra organización en el mundo. Esta vasta e ingeniosa red de heroicos periodistas ciudadanos abarca todas las provincias de China, y proporciona informes diarios de lo que está sucediendo en el país, a menudo asumiendo un gran riesgo.
Lea más sobre es.Minghui.org
3. Documentación independiente
En las últimas dos décadas, una amplia variedad de grupos internacionales de derechos humanos y entidades como las Naciones Unidas han documentado de manera independiente y relatado los abusos sistemáticos de los derechos -incluidas las torturas y las muertes bajo custodia- que sufren los practicantes de Falun Dafa en China. A continuación, algunos ejemplos…
Revisa nuestra colección completa de documentos independientes
4. Periodismo de investigación
Cuando el Partido Comunista Chino lanzó la campaña de persecución contra Falun Dafa hace 20 años, el mundo fue, comprensiblemente, sorprendido desprevenido. Después de todo, la mayoría en el oeste nunca había oído hablar de Falun Dafa. Si bien tomó algún tiempo resolver los hechos en medio de la red de propaganda del régimen chino, muchos en los medios occidentales ganaron pronto su posición.
El periódico Wall Street Journal ganó el Premio Pulitzer exponiendo la violenta campaña contra los practicantes de Falun Dafa. El Washington Post y otros periódicos siguieron con su propia cobertura innovadora, exponiendo las órdenes de los más altos rangos de funcionarios de Beijing de usar la tortura y la propaganda para “romper” a Falun Dafa.
Ethan Gutmann, un escritor de investigación estadounidense, defensor de los derechos humanos, observador de China y un autor ampliamente publicado es más conocido por sus dos libros: Perdiendo a la nueva China: una historia del comercio estadounidense, deseo y traición, y The Slaughter: Asesinatos masivos, sustracción forzada de órganos y la solución secreta de China a su problema de disidentes. Ha testificado ante el Congreso de los Estados Unidos, el Comité de Relaciones Exteriores de la Cámara de Los Estados Unidos, el Parlamento Europeo y las Naciones Unidas..
Desafortunadamente, en los últimos años, la influencia política y económica del PCCh a menudo ha dado lugar a una falta de cobertura sobre Falun Dafa en los medios occidentales, o tal vez peor, impulsó narrativas falsas sobre Falun Dafa — creadas por el PCCh- para ser titulares en los medios occidentales.
Revisa nuestra colección completa de periodismo de investigación
5. Admisiones del régimen chino
Irónicamente, muchos casos de abuso y tendencias pueden ser cotejados con sitios web locales del régimen chino que, a veces, confirman involuntariamente detalles de la campaña contra Falun Dafa. Esto no es muy común, pero ocasionalmente proporciona más evidencia de abusos contra los practicantes de Falun Dafa.