La práctica

Mientras que Falun Dafa es bastante simple de aprender -una combinación de ejercicios, meditación y vida moral-, sin embargo, tiene muchas dimensiones y comparte con las artes chinas similares un antiguo linaje.

En primer lugar, Falun Dafa se puede considerar una práctica -algo que se hace, que entra en acción. La práctica está diseñada para efectuar un cambio positivo, o reforzar lo que ya es bueno en el cuerpo, mente y ser.

En Falun Dafa, el cuerpo es atendido de una manera más directa, a través de la práctica regular de cuatro ejercicios de qigong y una meditación. Los ejercicios de qigong, popularizados en la China posterior a la Revolución Cultural de la década de 1980, se parecen un poco al Tai-chi en forma, y funcionan, de manera similar, en el cuerpo, principalmente en un nivel energético. Algunos se refieren al qigong como “yoga chino”.

Falun Dafa recalibra el cuerpo en un nivel energético mientras elimina los bloqueos e impurezas que podrían comprometer la salud y el bienestar. En niveles más profundos, la práctica, en sus propias formas únicas, trata con los orígenes más fundamentales de la enfermedad y el sufrimiento físico (es decir, un material nefasto llamado yeli o karma). La meditación facilita estos cambios y procesos mientras refuerza el mecanismo más sutil de la práctica específicamente para el cuerpo y la mente.

Varios estudios de salud, incluida la investigación clínicamente controlada y revisada por expertos en los principales centros médicos, han comenzado a explorar y confirmar los beneficios positivos y, a veces, dramáticos, para la salud que tantas personas atribuyen a la práctica. Muchas personas han compartido sus experiencias, que se pueden leer en línea.

Los beneficios típicos que las personas describen incluyen una mayor energía y reducción de la fatiga; mejor salud; mayor resistencia a las enfermedades; dormir mejor; equilibrio emocional; una sensación de calma; una perspectiva positiva; mejores relaciones; mayor conciencia de sí mismo; un significado más profundo de la vida; y crecimiento espiritual.

Los ejercicios y la meditación pueden ser realizados por personas de cualquier edad, nivel de condición física o antecedentes, y son altamente flexibles en términos de exigencias. Se pueden hacer durante unos pocos minutos, en cualquier momento o en cualquier lugar, o hasta unas horas si uno así lo desea. A menudo a las personas les gusta practicarlos junto con otros, como grupo, en un entorno tranquilo como un parque.

Se enseñan siempre de forma gratuita por voluntarios o se pueden aprender siguiendo un video instructivo. Estas características fueron probablemente parte del crecimiento fenomenal de Falun Dafa en China.

Si bien la dimensión física de Falun Dafa es importante, lo que distingue a esta práctica es el énfasis en la mente y la moral.

Falun Dafa es de naturaleza budista, y contiene en sus enseñanzas una aspiración superior -la perfección espiritual, o “iluminación”, como se le llama en Asia. En Asia, las disciplinas espirituales de este tipo a menudo se conocen como formas de “cultivación interior” o “autocultivación”, y forman una parte importante de la cultura tradicional china. Varias prácticas taoístas, budistas y confucianas encajan en esta categoría.

En el núcleo de Falun Dafa están los valores de verdad, benevolencia y tolerancia (o en chino, Zhen, Shan, Ren). La práctica enseña que estas son las cualidades fundamentales del universo y , como se explica en el libro Zhuan Falun, sirven como guía para la vida diaria y la práctica. Muchos estudian el libro regularmente para comprender mejor y encarnar sus enseñanzas.

A través de la práctica consistente y dedicada, el estudiante de Falun Dafa aspira a alcanzar un estado de desinterés, mayor entendimiento y conciencia, pureza interior y equilibrio, el mecanismo interno de lo que podría llamarse la verdadera salud.

Si bien Falun Dafa aspira a la transformación interna de ser, sin embargo, generalmente se refleja externamente en un cambio positivo en el mundo, en la medida en que el practicante se convierte en un miembro de la familia más paciente, un empleado más responsable, un miembro más generoso de la comunidad, y así sucesivamente.

Sin embargo, la práctica se enfoca siempre en el individuo, y como tal, las enseñanzas no se ven como un plan para el cambio social o político, ni se aplica a otros o al mundo en general.

Muchos observadores están sorprendidos por la apertura de Falun Dafa, tanto en términos de sus enseñanzas (es decir, no hay credo, conjunto de reglas o codificación de doctrina) como de su administración o promulgación (es decir, sin formas de iniciación, sin clero o profesionales religiosos, sin honorarios, etc.). Se anima a las personas a llegar a su propia comprensión de las enseñanzas, ya que el énfasis está en el crecimiento personal, algo que no puede ser coaccionado o hecho programático.

Se anima a los interesados en aprender la práctica a visitar https://es.falundafa.org, donde se pueden encontrar las enseñanzas de Falun Dafa y las instrucciones en video de sus ejercicios.